domingo, septiembre 03, 2006

La Odisea (casi) imposible de Buda contra Defensores

Once de la mañana del domingo 3 de septiembre de 2006, Puerto Madero. Bajo el sol que no salvaba del fresco, la gente normal fisuraba, dormía, o seguía con su normal jornada de trabajo, pero unos trasnochados esperaban. Paz, González, Llorente, Barabás y Lombardo miraban desesperanzados como los Defensores del Chirifló, con siete miembros, aguardaban a que se agotara el tiempo para ganar por abandono del equipo contrario. Sobre el césped, nunca tan duro, de la cancha 3, el humor del árbitro permitía la espera, mientras que Simón se recuperaba de su nariz, Beto desaparecía de este plano de existencia, Marce estudiaba y Papo y Richard cogían entre ellos.
A las 11.30, cuando todo parecía perdido 2 a 0 con goles adjudicados al capitán, como marca el reglamento, un tipo bajó del 130 y comenzó a trotar por Macacha Güemes hacia el predio Amadeo Jaqces. El tren lo había abandonado en el peor momento, y parecía que sus fuerzas pronto iban a hacer lo propio. Pero, al llegar a los portones, se escuchó el grito providencial: “¡SOMOS SEIS, HAY EQUIPO!”. Hijos de Buda, en desventaja, se aprontaba nuevamente a jugarle el fútbol a la adversidad, 6 contra 7.
El árbitro, a quien llamaremos José_buenaonda, pitó, y arrancó el encuentro. Los budenses se plantearon con Lucho y Maxi abajo, Lomba al medio, Faco al pedo arriba y Leo corriendo toda la cancha como siempre. Ellos defendían con duatro y avanzaban con dos, por lo cual no era difícil contenerlos, pero a ambos equipos les costaba generar juego en el centro. Maxi ponía su mítico huevo, Leo hacía lo que podía para dar bien los pases y Faco se esforzaba en no dar vergüenza. Defensores del Chirifló, en honor a su nombre, se limitaba a defender. Intrascendentemente transcurrió el primer tiempo. Hasta que otra llegada providencial de un Buda fisura inclinó la cancha: sobre la línea de cal, a los 18 minutos del primer tiempo, el único verdadero delantero y poseedor de la 87, Agustín “Gusa” Lambiase, pedía y obtenía el ingreso al campo de juego. Dos minutos más de juego, y derecho a las canillas.
Sabíamos que Defensores del Chirifló no era Brasil del ’70, así que la charla técnica consistió en reorganizar el equipo para mantener a Maxi y Lucho en defensa fija, Leo de 5 con proyección, Lomba de mediocampista lateral por ambas puntas, Gusa de delantero y Faco de lastimoso, don el fin de quebrar su 4-2 inflexible. Al grito de “¡Vamos, que se puede ganar!”, los Hijos de Buda reingresaron al campo de juego.
Con Gusa, la situación fue otra. Nuestra defensa, que pasaba de ser dos a cuatro personas dependiendo de los aportes de Leo y Lomba, pero todos salieron con el machete entre los dientes a matar o matar, sin dejarlos patear. Luego de la recuperación, el lema “Garra, corazón y pases largos” se hacía dogma: Gusa y Faco se cansaron de ir a correrla, con buenas intenciones y buen toque, pero no el suficiente para abrirles el arco. La presión constante de los delanteros logra un lateral cercano al área, que procede a ejecutar lomba. Gusa se eleva desde el punto del penal, contacta con el parietal izquierdo, infla la red, y Buda entero enloquece. Merecidísimo uno a cero y a seguir peleándola con la docena de huevos.
Los defe salieron a pelearla con sus líneas de 2-4 o 4-2, pero la saña sanguinaria de Maxi, el huevo de Leo, la presión de Lomba y la pared humana que es Lucho hacían inútiles todos sus intentos. Fede respondió correctamente en las pocas ocasiones que le venían tocando. Leo, Maxi o Lomba se relevaban para subir y armar el juego, mientras Faco y Gusa hacían un buen trabajo para llevarse la marca. En una recuperación, FEDE reviente hacia arriba, Faco se apronta para pararla o perderla sobre el borde derecho, hasta que escucha un grito de “¡DEJALA!” del señor Gonzáles. Como Enrique contra Inglaterra en el ’86, Faco la deja, Maxi permite un pique, y revienta un pelotazo que dejó chiquito a Cárdenas y a Maxi Rodríguez. Derecho, sin efectos, la pelota iba a manos del arquero, pero un descuido de la defensa y una avivada de Gusa conjugaron que el balón pique frente al golero y le pase por arriba; el delantero sólo tuvo que empujarla. 2 a 0 para Buda en un partido rengo: total euforia de los naranjas. Pocos goles se gritaron tanto. La pila humana que se generó conmovió hasta a los espectadores que nada tenían que ver con nadie.
Pero nada en la vida es gratis, ni las alegrías duran por siempre. Defensores de Chirifló, viéndose lejos de los penales, y virtualmente fuera del torneo, se enchufó. Salieron los 4 arriba a descontar con todo. Titánica tarea de Lucho, Maxi y Leo, que parecían no querer irse del campo sin una extremidad del rival. Hasta Faco y Gusa aportaban en la defensa. La desgracia quiso que un Defe apilará a los 3 mariscales del área en un rincón, dejando a otros dos jugadores solos frente a Barabás, que nada pudo hacer, y el partido se niveló 2 a 1. Buda tuvo la suerte de no perder la calma, reorganizó la defensa y siguió buscando el ataque, pero los Defensores se embalaron y llegaban por todo lo que no llegaron antes. Entre corners, tiros libres y laterales, nos tuvieron los últimos cinco minutos cortando clavos permanentemente.
Aquí, la figura de Barabás se hizo gigante, al sacar un balón del ángulo y descolgar unos tres centros peligrosísimos. Salvó la integridad budense y los ciertamente riesgosos penales. Después de cinco minutos de parir rinocerontes, Jose_buenaonda volvió a pitar y decretó el fin del encuentro. Hijos de Buda 2, Defensores del Chirifló 1. El primero continua el repechaje, el segundo se vuelve a casa.
Sobre el césped rasposo, bajo el sol que vence al frío del pecho de los que no llevan al fútbol en el alma, un solo cántico hizo su reaparición:

AUNQUE GANES O PIERDAS,
NO ME IMPORTA UNA MIERDA.
YO SOY HIJO DE BUDA,
Y LA TENGO PELUDA
Y LA TENGO PELUDAAAAAAA.

Elongación, descanso, incidente, y a seguir con la caprichosa hasta el domingo que viene, donde esperemos ser 9 al menos. La magia, el budismo, el azar, hicieron que la Odisea imposible fuera pasada por arriba. Gracias.

Nota: Gusa afirma que en el primer gol, el lateral fue ejecutado desde la izquierda y él lo cabeceó con el parietal derecho, pero él estaba fisura, todos sabemos que es homosesual, y el que escribe la crónica acá soy yo, así que confórmense con este comentario.

Análisis de los jugadores, uno por uno:

Fede: Respondió bien durante la mayor parte del partido y no fue, en forma alguna, responsable del gol contrario. Salió abajo mucho mejor de lo que venía haciéndolo. Y salvo el partido en los últimos minutos. Hay espacio para mejorar, pero por hoy no hay quejas: 8,5.

Luciano: Impecable, la columna y pilar de la defensa, cumplió como siempre. Saca todo lo que le pasa cerca, con un rusticismo que no podemos dejar de amar. El jugador más constante del equipo, su defensa no tiene parangón: 8.

Maxi: Si buscan huevos, saben a donde acudir. La pierna, el balón, y si son los dos juntos mejor. Muy buena defensa y recuperación, lastimando en los momentos justos, y muy buen aporte al ataque. El gol te hace ídolo. No hay nada más que decir: 9, porque no pongo dieces.

Lomba: Corrió, defendiendo y atacando por las dos bandas. Sigue siendo un pajero, pero cómo corrió en este partido =P. El centro a Gusa fue fundamental, justísimo, y aunque a veces estabas medio perdido, jugaste muy bien. Te quiero. 8.

Leo: Otro que tiene un gallinero en casa para poner huevo por 20. Recuperó bien, marco precisó, despejó siempre. Por como se armo el partido no aportó demasiado al ataque, y muchos laterales se le fueron por el viento, pero si hablo mal del capitán no juego nunca más. Igual la recuperación y el pase al ataque estuvo con buena intención, así que va bien: 7.

Gusa: Fundamental, no lo hubiéramos podido ganar sin él. Bueno, cualquiera que faltara nos hacía perder el partido, pero su aporte al juego fue gigante, en especial por el gol. Como delantero puro y otro de los jugadores más constantes del equipo, presionó y se llevó a la marca, aunque a veces no pudo conectar con Faco. Golazo el primero y aporte al segundo. Me pongo de pie, pero descuenta puntos el haber llegado a la mitad del partido: 8.

Faco: Fundamental, porque si no éramos 6 a las 11.30, quedábamos afuera. Hizo lo que pudo en el primer tiempo, y apoyó bastante en el segundo, bajando a defender y marcando, cuando ya los defensores no podían más. Puso todo el huevo que pudo. Necesita más conexión con Gusa y Lomba y un mejor estado físico, pero en general hizo un buen partido llenando el 6to jugador y trayendo el agua. A considerar para futuros faltazos: 7, por bueno.

Eso es todo.

Faco (2), Aguatero, cronista, jugador lastimoso.

PD: Sí, ya sé que esta es la única crónica del año, que estuve paja y todo, pero recién ahora tuve tiempo y este fue un partido muy épico como para no narrarlo. Chupenlá, aprendan a escribir ustedes si son tan pijas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

GROSA Crónica. I like your style Fac.
Ni da hacer las crónicas de derrotas.

Anónimo dijo...

recuerden que yo le dije a maxi: pegale! en el segundo gol.

vamos buda, a sergio denis le pasan el trapo.

Anónimo dijo...

¿Jugamos contra Sergio Denis? Tenemos chances...fue el que le ganó por penales a los Rondamones creo, el día que gusa le dio un pelotazo en la cabeza a uno. Faco, estoy algo en desacuerdo con los puntajes. Leandro mereció más, 8 por lo menos. Y Luciano debió tener 8,50 porque no fisuró, se bancó la fisura.